1. RETURN - TDV Capítulo 2

 

Capítulo 2

 

Rose – Marie: Aun te puedes arrepentir. – Me indica Rose. – Podemos intentarlo de nuevo, esta vez sí te seguiré.

Mina: No, ya me cansé de huir. – Le dije seria. – Tenias razón, es tan… cansado.

Camine hacia la estancia de los Salvatore, había escuchado a Elena llegar al fin, Rose se posicionó a mi lado.

Rose - Marie: Ahora deben entender que solo sé lo que he escuchado. – Empezó a hablar Rose. – Y no sé qué es cierto y que es leyenda.

Mina: Por las dudas, yo puedo confirmar eso. – Levanté una mano y Damon me miró de mala gana. - ¿Qué? Klaus es real.

Elena Gilbert: ¿Quién es Klaus? – Preguntó Elena.

Damon Salvatore: Uno de los originales. – Expreso Damon. – Una leyenda.

Stefan Salvatore: La primera generación de vampiros. – Terminó por Stefan.

Lo miré unos instantes para después desviar la mirada, aun no me acostumbraba a verle.

Elena Gilbert: ¿Cómo Elijah? – Volvió a preguntar la chica.

Rose – Marie: No, Elijah es un conejito al lado de Klaus, es un soldado, Klaus es el general. – Expreso Rose con fastidio.

Stefan Salvatore: Se dice que es el más viejo. – Intervino Stefan.

Mina: En realidad, creo que en si los originales tienen la misma edad. – Volví a intervenir.

Elena Gilbert: ¿Quieres decir que el vampiro más viejo de la historia, me está persiguiendo? – Se removió nerviosa.

Mina: Sí.

Stefan Salvatore: No.

Miró a Stefan y Rose con una ceja en alto, ya pónganse de acuerdo.

Damon Salvatore: Bueno, si todo es verdad. – Empezó Damon.

Rose – Marie: Que lo es… - Murmuró Rose fastidiada.

Damon Salvatore: No puedes asegurarlo. – Intervino Damon.

Mina: Yo sí. – Mire fijamente a Elena. – Klaus es real, porque también me encontró hace siglos atrás, e intento hacer conmigo lo que se propone a hacer contigo…

Stefan Salvatore: Bueno, Elijah está muerto, nadie más sabe que existes. – Añadió Stefan intentando mantener más calmada a la chica.

Mina: No está muerto. – Rodee los ojos. – Es temporal, volverá.

Damon Salvatore: Le atravesamos el corazón. – Me riñe Damon.

Mina: Sigue creyendo eso. – Rodee los ojos. – Si fuera tan fácil, no estaría aquí para empezar.

Pase a su lado, con una sonrisa claramente irónica.

Estoy frente a la casa, buscando como loca las llaves en la cartera.

Stefan Salvatore: Lindo apartamento. – Expreso el chico tras mío.

Sabía que me habían seguido.

Mina: El dinero nunca ha sido una dificultad para mí, se acumula con cada siglo. – Le expreso antes de voltear y encontrarme a Stefan mirándome tenso. – Además, necesito sitios donde mantener a Rose fuera del sol.

PD: se expresa darme la vuelta o girar.

Él asintió mirándome fijamente.

Stefan Salvatore: Vine por respuestas. – Expreso serio.

Mina: Lo supuse. – Caminé alrededor de él con una sonrisa socarrona. - ¿Quieres pasar? Rose se quedó este día en la mansión.

Él asintió, aun serio, sabía que estaba demasiado intrigado por todo esto, y más sabiendo que su querida Elena estaba en peligro.

Stefan Salvatore: ¿Quién eres? – Preguntó tenso.

Mina: Katherine y Elena no son las únicas Doppelgänger que existieron. – Dije evadiendo la mirada.

En realidad, ellas eran mis dobles, pero prefiero dejarlo así por el momento, no quiero tener a nadie haciendo preguntas de más, o sabiendo demasiado de mi pasado.

PD: realmente fue Amara.

Stefan Salvatore:  Aun no me has dicho tu nombre…

Volví a apartar mi mirada de él, en serio no lo soporto.

Mina: Llámame Mina. – Le pedí. – Me imagino, quieres saber de qué trata todo eso del sacrificio Petrova…

Stefan Salvatore: Soy todo oídos.

Tome aire.

Mina: Es fácil, Klaus quiere deshacer la maldición, y para ello tiene que asesinar a la doble. – Él me miró tenso, estaba preocupado. – Y cuando él quiere hacer algo, no les importa a cuántas personas lastima en el proceso.

PD: sería dañar o hacer daño.

Stefan Salvatore: Pero tú estás aquí, y Katherine…

Mina: Escuche por Rose y Trevor que ella escapó, se transformó en vampiro antes de que pudiera darse el sacrificio. – Camine hacia la nevera y tome una de las bolsas de sangre que había sacado del hospital. – Yo tuve mis propios medios.

Stefan Salvatore: Elijah parecía sorprendido de verte. – Me indicó.

Sonreí ligeramente, mientras tomaba un trago de la bolsa.

Mina: Me creían muerta. – Le reste importancia. – Me lancé de un risco cuando ellos estaban a punto de tomarme…

PD: sería acantilado, y atraparme.

Stefan Salvatore: Y te transformaste en vampiro. – Adivino.

Mina: Es algo mucho más complicado que eso. – Le mire ligeramente.

Mi teléfono vibra, lo levanto y miro el mensaje de Rose.

Mina: ¿Dejamos la charla para después? –Tome mi bolso. – Tu lindo hermano secuestro a Rose, más le vale que ella esté bien.

Entre en el establecimiento con rapidez, como de costumbre la cafetería estaba llena de vampiros.

Mina: Creí que tendría que romperle la cara. – Dije cordialmente mirando a Damon. – Pero al parecer no es tan desagradable.

Rose rodó los ojos.

Slater: Mina. – Slater camino hacia mí y me dio un cálido abrazo. – Cuánto tiempo ha pasado. Rose me contó lo de Trevor, lo siento mucho.

Mina: Fue duro. – Asentí. – Pero supongo que ahora es libre…

Damon Salvatore: Bueno, ¿podemos seguir con nuestra conversación? – Nos interrumpió Damon. – Elijah podría estar bajo el sol, es decir que ellos saben de los anillos, ¿Por qué querrían levantar la maldición?

Slater: Ellos no querían que los hombres lobo lo hicieran. – Rodee los ojos al ver a Slater responder.

Sabía más o menos lo que Klaus quería, pero verlos tan desesperados en descubrirlo era algo divertido.

Slater:  Si un vampiro rompe la maldición, los licántropos pueden quedar malditos para siempre y viceversa. – Continuo. – Pero, bueno, son solo rumores.

Damon Salvatore: No son rumores. – Aventuro a decir Damon con ironía.

Slater: Tengo que visitar Mystic Falls. – Murmuro Slater sonriente.

Me levanto con rapidez, pero ya es demasiado tarde, los vidrios del local se rompen y Rose grita al ser quemada por el sol.

Mina: Llévatela. – Le pido a Damon.

Salgo del local con prisa y aparezco frente a él.

Sabía que estaba vivo.

Mina: No permitiré que le hagas daño a Rose. – Dije firme. – No después de lo de Trevor.

Elijah Mikaelson: Isabela. – Me miró de arriba abajo. -  No quise creerlo, pero estas tan cambiada.

Mina: No soy la misma chica inocente que conociste Elijah. – Utiliza su velocidad y aparece frente a mí.

Siento su aliento cae sobre mi mejilla y me estremezco.

Elijah Mikaelson: Creía que estabas muerta, todos lo creíamos. – Su voz suena dura. – Klaus no tomará esto por alto.

Mina: ¿Vas a decirle? – Siento la garganta seca.

Me inquietaba lo bien que podría fingir que nada pasaba, tan imposible, como si no le sorprendiera en absoluto que estuviera viva.

Elijah Mikaelson: Puedo descubrirlo por sí mismo.

Mina: Elijah… - En un solo parpadeo él ya había desaparecido.

Solté una maldición.

Ahora posiblemente tendría a Klaus también respirándome en el cuello…

Rose - Marie: Vidrios polarizados. – Me felicita Rose abriendo la cortina para sentir el calor.

Mina: Creí que te gustarían. – Murmuré sonriente. – Por cierto… no dormiste aquí anoche…

Rose - Marie: Ya lo sabes. – Se lanzó a mi lado en el sofá.

Mina: Rose, te conozco desde hace más de quinientos años. – La codeé. - ¿Qué tal el mayor Salvatore?

Rose - Marie: Solo fue una noche. – Intento evadirme. – Fue confuso, nos dejamos llevar y… simplemente pasó.

Reí al verla tan sonrojada, nunca la había visto así, el huir de Klaus la habían alejado demasiado de los chicos y todo lo que tenía que ser romántico.

Mina: Me alegra verte feliz. – Le sonreí. – Pero… recuerda que ese chico ya está enamorado de alguien más.

No había pasado por alto las miraditas que le lanzaba a Elena, mi teléfono sonó.

Era un mensaje de…

Mina: ¿Le diste mi número a Stefan? – Mire a Rose desdeñosa.

Ella levantó ambos brazos en son de paz.

Mina: Gracias… - Murmure. – Parece que me necesitan, ¿Cuándo les dije que los ayudaría?

Rose - Marie: Desde que ellos también están en contra de Klaus. – Indico. - ¿A qué se debe? ¿Por qué decidiste involucrarte después de tantos años huyendo?

Mina: Mataron a Trevor. – Le indique. – Tú y él son la única familia que he tenido desde… desde hace mucho tiempo, ya me cansé de huir, y hacer la vista gorda cuando tú también puedes morir y dejarme sola.

Rose - Marie: Estaré bien. – Me sonrió. – Jamás me has contado del todo por qué huyes de Klaus, sé que es algo más, no solo huis del sacrificio, ¿verdad?

PD: huyes.

Me paralice unos momentos, no estaba lista aun para contarlo, siglos han pasado y aún sigo herida.

Mina: Tengo que irme.

Mina: ¿Cuál es el veredicto? – Camino hacia la tumba bajo la enorme iglesia.

Una chica morena está acompañada junto a un chico de cabellos negros, por su aura puedo saber muy bien que es una bruja.

Tyler Lockwood: ¿Es ella? – El chico me mira de arriba a abajo, sosteniéndose el cuello, se ve herido.

PD: tiene toda la pinta que es Tyler.

Mina: Stefan me mandó un mensaje. – Levante mi teléfono en alto.

Poco a poco la figura del chico aparece dentro de la cueva, acompañado de…

Mina: Santo cielo, Katherine Pierce. – Me relamí al verla tan desgastada. – Que sorpresa tan inquietante.

Katherine me analizó unos instantes antes de palidecer aún más.

Katherine Pierce: ¿Qué haces tú aquí? – Gruño alejándose.

Mina: Mystic Falls es un pueblo agradable, la época es buena… - Me encogí de hombros. – Solo quería unas merecidas vacaciones.

Stefan Salvatore: ¿Se conocen? – Stefan nos analiza.

Katherine: Por desgracia. – Gruño Katherine. – Se ha salvado el pellejo haciéndose pasar por mí durante años…

Mina: Pero que grosera eres. – Rodee los ojos. - ¿Alguien me puede decir que demonios hago aquí?

Bonnie Bennett: Stefan está encerrado junto a Katherine. – Me explica la morena. – Quiere hablar contigo sobre Klaus.

Mina: Se me está haciendo costumbre esta conversación. – Suspire rabiosa.

Ya tenía suficiente con Elijah sabiendo que estoy viva… otro problema que tengo que remediar.

Stefan Salvatore: ¿Qué sabes sobre destruir la piedra de luna?

Con que por ahí va la cosa.